A lo largo de los años se han implementado diferentes tipos de motor para aprovechar al máximo los avances tecnológicos y de esta forma ser más generoso con el medio ambiente. Hoy en Desguaces Castilla te damos consejos para los coches con motores diésel y te ofrecemos una gran variedad de piezas de coche de segunda mano para que tu vehículo tenga una vida lo más larga posible.

Gracias a ello hoy día existen una gran cantidad de motores de diferentes capacidades y también de diferentes tipos de combustibles. Contar con un coche diésel es una gran ventaja al compararlo con uno de gasolina, su eficiencia es muy destacada.

Es de gran de relevancia saber cómo puedes cuidar tu coche diésel. ¿A qué problemas debes prestar atención con un automóvil diésel? En este artículo abordaremos este tema y otras preguntas a fin de que disfrutes tu vehículo por mucho tiempo.

Recomendaciones para conducir un coche diésel de manera eficiente

Sea que tengas experiencia o no en la conducción de un coche diésel, es muy importante que conozcas las siguientes sugerencias, esto te evitará estrés y podrás sacar el máximo provecho a tu vehículo. Veamos cuáles son.

Encender coche diésel

Encender un auto es algo sencillo, en el caso de los coches diésel es necesario tener en cuenta varias cosas. Por ejemplo, el coche solo puedes tenerlo en primera al momento de encenderlo, pero al momento de conducirlo debes subir a segunda de inmediato.

Además, algunos conductores tienen la costumbre de presionar el acelerador al momento de encender el auto, pero no debes hacerlo en el caso de los autos diésel y tampoco puedes empezar a recorrer de inmediato. Solo después de esperar varios minutos puedes hacerlo.

Marchas en motor diésel

Las marchas son una parte importante del proceso de conducción y, en el caso de los motores diésel, debes tener presente ciertos límites, por ejemplo, no superar las 3.500 rpm. También, si superas las 1500 rpm, debes hacer un cambio de marcha de inmediato.

Procura mantener el vehículo en cuarta o quinta, eso ayudará a cuidar tu motor y ahorrar combustible.

Velocidad

Hablemos ahora de la velocidad a la que debes conducir, y no, no estamos poniéndole un límite a la velocidad a la que puedes desplazarte, pero si quieres proteger tu coche, debes asegurarte de poder mantener esa velocidad por un buen tiempo. Según las revoluciones entre  las 1.500 y 2.000 r/min.

Cuando hay cambios constantes de marcha o de velocidad, exiges más del motor y acortas su vida.

Frenos en coche diésel

Este punto guarda relación con el anterior pues frenar de golpe es muy negativo para tu auto.

Si deseas proteger el motor y el resto del vehículo es muy importante que hagas uso del freno motor, si es que tu coche lo posee.

También puedes valerte del mismo movimiento del auto para desacelerar y finalmente detenerte. Si vas a estar estacionado en un lugar por cierto tiempo, 1 minuto o más, entonces la mejor alternativa que tienes es que apagues el motor.

Distancia entre tu coche y otros

Ya es de por sí una norma mantener la distancia en la carretera con otros automóviles, de esa manera se evitan accidentes, pero si a esto le sumamos lo dañino que es para coches diésel frenar abruptamente, entonces mantén siempre la distancia entre tu coche y los demás.

El hacerlo así, te permitirá tomar en consideración cualquier elemento en el camino y reducir a velocidad de manera gradual.

Este consejo es sobre todo aplicable a las horas de más tránsito pues, justo en esos momentos, se busca aprovechar cada centímetro del recorrido para salir lo más pronto posible de allí. Pero recuerda, es mejor llegar un poco más tarde que perder en poco tiempo tu coche.

¿Cómo mantener en buen estado un motor diésel?

Para mantener en buen estado este tipo de coche hay que estar consiente de los hábitos de conducción, considerando algunos componentes de los diésel modernos, tales como válvulas EGR, su sistema de aceleración, además de alta temperatura de los gases de escape, entre otros elementos importantes.

Ahora, comentaremos otras sugerencias que debes tener presente siempre, pero que están relacionadas con el mantenimiento del motor así como del resto del automóvil.

  • Vaciado del tanque. Es verdad que todos deseamos aprovechar hasta la última gota de combustible, pero en este caso sería peligroso hacerlo debido a los residuos que contiene el gasóleo, los cuales pueden llegar a otras partes del coche y dañarlas. Así que lo mejor es fijar un límite y, al llegar a él, reponer el combustible.
  • Reponer combustible. Hablando de los residuos que posee, en algunos encontrarás más que en otros, y es por eso que, una vez encuentres un buen lugar de llenado, es mejor que sigas fiel a ese lugar. Tú, tu coche y tu motor lo agradecerán.
  • Mantenimiento básico. Es verdad que el auto puede presentar alguna falla y de inmediato parar en el taller, pero no esperes a que sea demasiado tarde para revisarlo. De hecho, nuestra recomendación es que tomes el tiempo para un chequeo cada vez que superes la cantidad de 15 mil kilómetros.
  • Equipos adicionales. Es cierto que todos apreciamos un vehículo con aire acondicionado o en el que puedas colocar una buena música, pero, no abuses de su uso pues influye directamente en el gasto del gasóleo.
  • Aditivos. La limpieza es la clave para que la vida útil de tu coche aumente, o al menos se mantenga. Por eso, se han fabricado aditivos que permiten mantener dicha limpieza y, a la vez, aumentar el rendimiento de tu motor.

 Falla común en motores diésel

Los motores diésel ofrecen muchas ventajas, a las cuales les sacarás mucho provecho siguiendo los sencillos consejos que hemos comentado aquí. Ahora bien, es bueno que también estés al tanto del problema más común en este tipo de coche. Veamos.

Se trata de la obstrucción de algunos de sus componentes debido al combustible o a los químicos que son formados y requeridos para su funcionamiento.

En algunos casos, bastará con una limpieza realizada por un profesional, pero en otros casos requerirá cambiar la pieza.

Por eso, es muy importante que vigiles regularmente tu coche, especialmente el motor. De esa manera evitarás males mayores. Y es que un cambio de pieza podría fácilmente alcanzar los 500 dólares, como mínimo, y superar hasta los 5000 en el caso de piezas mayores.

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